Decisión

Freddy Rodríguez García

Ya solamente resta una semana de campaña. El próximo viernes estaremos en completo silencio: los indecisos estarán contritos y angustiados analizando por quién votar, y por qué hacerlo por el uno y no por el otro.

Algunos ciudadanos, llamémosles escépticos (cómodos, los llaman otros), promueven el voto nulo, argumentando que las propuestas presentadas por los dos candidatos finalistas, o los rasgos de sus personalidades, nos les satisfacen, y eso les impide decantarse por una de las opciones.

Para aquellos que aún no deciden su voto, o para quienes están pensando anularlo, comedidamente les sugiero que hagan las siguientes reflexiones: ¿Existe algún proceso legal por supuestos actos de corrupción en contra de ambos candidatos, o solamente en contra de uno de ellos? ¿El grupo político que apoya al candidato ya fue gobierno y, en caso de que haberlo sido, ejerció el poder democráticamente, fue respetuoso de la independencia de las funciones del Estado, puso cortapisas al derecho a expresarse libremente, fue tolerante con la prensa, persiguió a sus opositores o los enjuició?¿El líder del grupo político del candidato es una persona honesta, o acaso pesa sobre aquel una sentencia firme por corrupción, o quizá tiene todavía cuentas pendientes con la justicia, o talvez está prófugo? ¿Con cuál de los candidatos hay más garantías para ejercer una oposición democrática, sin temor a ser insultado, perseguido, denigrado o vejado por opinar diferente? ¿Existe la certeza que ambos tendrán la suficiente autonomía para ejercer la presidencia directamente, sin la influencia nociva de un tercero? ¿Cuál de los dos candidatos tiene un programa económico más coherente, y ha dado señales inequívocas de que mantendrá la dolarización? ¿Alguna propuesta de cualquiera de los candidatos pone en serio riesgo la dolarización? ¿Tiene alguno de los candidatos la intención de desarrollar un proyecto político para permanecer veinte o cincuenta años en el poder? ¿Alguno de los dos candidatos admira a Hugo Chávez, a Nicolás Maduro, a Daniel Ortega o a los Kirchner? Ahí les dejo, amables lectores, algunas claves que les podrían ayudar a decidir su voto. De nada.