Costos reales

ARMANDO DAZA QUIÑÓNEZ
ARMANDO DAZA QUIÑÓNEZ

La política es la ciencia que facilita a los actores aplicar con mucha habilidad las políticas de desarrollo en una comunidad, como crear o eliminar impuestos, crear trabajo, subsidiar combustibles, crear y derogar leyes que afectan a la población entre jóvenes y adultos. Desde este mes de enero de año 2022, los trabajadores tienen aumento de 25 dólares al sueldo básico; pero la canasta familiar cuesta 600 dólares puesto que aplicamos el sistema de libre comercio que implica oferta y demanda.

Los productos derivados del petróleo marcan la diferencia así los alimentos y demás juegan al sube y baja con el petróleo; en los últimos meses de 2021, el gobierno congeló el precio de la gasolina, contrariamente hubo un incremento de los precios de los productos de primera necesidad. La teoría monetaria sostiene que los países identificados con el uso del dólar o moneda fuerte deben mantener los costos de todos los productos invariables.

El Ecuador maneja el tema monetario a su manera, sin respetar reglas claras lo que ha causado, de algún modo, conflictos individuales como familiares, empresariales y estatales. El Estado tiene la obligación a través de las instituciones correspondientes de establecer costos reales de todos los productos que se comercializan con controles efectivos sean de consumo diario, de estructura fija, o activo así como de servicios. Albert Einstein dijo: “La inteligencia se mide no por su sabiduría, si no por la creatividad”.

Quienes asesoran a los gobernantes, los funcionarios de alto nivel deben demostrar y, usar su inteligencia aplicando políticas, en el campo económico, productivo e industrial, que creen fuentes de empleo, especialmente en las obras públicas, como la construcción de viviendas, carreteras, infraestructura, y especialmente invertir en educación desde el jardín hasta la universidad; aplicando procedimientos que armonicen el sector empresarial, laboral y estatal, que se comprometan los empresarios a pagar buenos sueldos, los trabajadores a no hacer huelgas y producir más, y el estado a crear normas para el buen vivir y felicidad  de la sociedad; en definitiva para repartir la riqueza equilibradamente, despertando en el hombre profunda conciencia de justicia, de honestidad y de creatividad, especialmente en las áreas de la ciencia y tecnología, para crear talentos.

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