La única realidad tangible es que las infecciones en la pandemia continúan aumentando, las camas de hospital y las unidades de cuidado intensivo han colapsado y, en algunos casos, el virus se ha vuelto más agresivo. Después de un análisis extenso, algunos números de infecciones y muertes se distorsionaron debido a la falta de pruebas de PCR, y se obtuvieron datos sobre posibles víctimas del covid-19. Debido a muchos cambios, el gobierno introdujo una medida fácilmente digerible.
Si bien las 16 provincias que implementaron esta medida se encuentran en desventaja en determinadas actividades económicas, el toque de queda se cumple. Se han agregado límites aquí ya que, según el decreto, las restricciones a la circulación de automóviles y personas deben aplicarse durante cuatro fines de semana consecutivos. Muchas personas optan por a puerta cerrada el fin de semana realizar fiestas o reuniones familiares. Pero quizás no consideraron que la policía puede entrar a la casa.
No basta con declarar medidas punitivas. No sé por qué mucha gente piensa que no hay mucho riesgo en uno a tres años de cárcel. Algunos psicólogos y expertos creen que el dilema equivocado es el de siempre: salud, vida y economía. O morirá la gente o morirá la economía. Todos queremos saber si existe un término medio o una combinación saludable para mantener la vida después de que la mayoría de las personas se vacunan. El hecho es que las autoridades ahora pueden comenzar a evaluar si el confinamiento del fin de semana es efectivo y si hay alguna necesidad de corrección.
Todas las medidas deben tomarse de manera oportuna y la comunicación debe ser clara, completa y de comprensión universal. En medio de cambios y tensiones, esta no es una tarea fácil. Las rigurosas medidas tomadas muestran que los estatutos, órdenes judiciales y ordenanzas, algunas personas no saben lo suficiente sobre las nuevas regulaciones. Debemos encontrar una salida viable para la salud, la economía y el empleo, que también son algo primordial.