Verano académico

Pablo Escandón Montenegro

La semana pasada, como actividad anual de la Asociación Latinoamericana de Investigadores de la Comunicación (Alaic) se desarrolló en la Universidad Andina Simón Bolívar, sede Ecuador, la X edición de la Escuela de Verano, en la cual participaron una veintena de estudiantes de doctorado y maestrías de Brasil, México, Argentina, Bolivia, Colombia, Chile y Ecuador.

De manera presencial y en línea, los estudiantes latinoamericanos compartieron sus trabajos de investigación en curso o finalizados, con la finalidad de poder encontrar mayores y mejores puntos de vista y así mejorar, delimitar o redefinir sus propuestas.

Este es un ejercicio que enriquece el trabajo de los investigadores en formación, y que les abre la mente a nuevas lecturas, perspectivas teóricas y conceptos que no conocían o que no tenían en su radar.

Profesores de Ecuador, Argentina, Brasil, Uruguay y México dieron sus aportes a los proyectos de investigación, que con mucha humildad expusieron los estudiantes en jornadas de cinco horas, en las cuales se retroalimentaron con observaciones de sus pares.

Espacios como la Escuela de Verano de Alaic, que se realizó por primera vez en Ecuador, convocan a la reflexión de dónde estamos como docentes e investigadores de la comunicación, ya que, al mirar los trabajos latinoamericanos, podemos realizar un balance de cómo está la academia ecuatoriana, la universidad y las profesiones que tienen que ver con la comunicación y el periodismo en nuestro país.

Ecuador debe abrirse a recibir más de estas iniciativas en las cuales participan los estudiantes, que son la razón de la existencia de las universidades, pues solo con ellos el proceso de enseñanza-aprendizaje es real y las investigaciones son aplicadas en la comunidad.

Lo más destacado de las exposiciones de los estudiantes es que ninguno de ellos es protagonista, sino la comunidad, la sociedad y los grupos con los cuales y sobre los cuales investigan; no hay vanidad ni ego, tan solo servicio y ánimo de transformación social. Eso me llevo como aprendizaje de estos jóvenes, que me enseñaron el valor de la humildad y el beneficio social de la investigación en comunicación.

Gracias y nos veremos pronto, colegas, en otro verano académico.