Lucha eterna

Eduardo F. Naranjo C.

La narración histórica cita continuas luchas por justicia y pocos tramos  donde se alcanzó. En este territorio que nos aglutina como país vemos absortos y con poca esperanza que la riqueza del suelo ecuatoriano llegue a todos; los oligarcas se imponen sobre toda ley y orden.

El Colegio de Ingenieros, Geólogos y ramas afines, presentó una alerta al presidente de la República y sus ministros, explicando la necesidad de revisar los contratos de prestación de servicios de los bloques 16 y 67 en la Amazonía, que terminan su vigencia. Consideran oportuno hacerlo en este momento y adjuntan un diagnóstico de situación del petróleo, reservas y la renta generada a fin de lograr un beneficio justo para el país.

Se conoce que cualquier individuo con ‘influencia y dinero’ se transforma en empresario petrolero, asociándose con ‘empresas extranjeras’ de poca monta y medios fantasmas, para presentarse a concursos y tomar el oro negro, aprovechando la ignorancia y mala fe de los políticos, así como la corrupción endémica del sistema.

El interés de profesionales éticos y especializados en el tema está siempre presente, con la esperanza de lograr mejores condiciones contractuales que beneficien la economía nacional y se revierta en educación, salud, vivienda e infraestructura.

Acciones pertinentes y valiosas se pierden en el mar de información distorsionada, dejando  desesperanza y rabia, porque la riqueza ecuatoriana va a parar en paraísos fiscales, donde se esconden sin ética ni solidaridad, en tanto multitudes engañadas y sojuzgadas lloran la injusticia eterna.

Empresas fabricadas presentan ‘documentos’ como válidos, pero en realidad son gentes con cierta información y contactos que buscan oportunidad de hacerse de un contrato de servicios y luego volverlo a negociar a otra empresa, así se hace dinero fácil y ‘legalmente’.