¿Esto es lo que querías, pueblo ecuatoriano?

Ugo Stornaiolo

El presidente Lasso declaró: “he escogido gobernar seis meses en el purgatorio en lugar de dos años en el infierno” y alivió a la población al disolver una asamblea nefasta con planes de desestabilización, desde mayo de 2021. Pero, algunos creen -asesores despistados- que el mandatario podría ser candidato.

Desde Bélgica, el gran prófugo trona y anuncia la “pronta recuperación de la patria”. Para el correísmo lo que hizo Lasso fue música celestial: creen que ganarán las elecciones exprés de agosto (su famoso voto duro de 25%).

Tan pronto se decretó la muerte cruzada, surgieron ‘redentores’. Hay nombres como el del exasambleísta Fernando Villavicencio, que se hace llamar representante de la ‘gente buena’, con una variopinta mezcla entre sindicalistas, Ruptura de los 25 e hijas de un expresidente de derecha.

Pateando el tablero un experto en seguridad, miembro de la Legión Extranjera francesa, que dice haber combatido en Ucrania, Siria y países en guerra. Un ‘rambo criollo’: Jan Topic. Dueño (con su padre Tomislav, amigo del exvicepresidente Jorge Glas) de la mayor proveedora de internet del país. Con auspicio socialcristiano, quiere ser un ‘Bukele criollo’. En la misma corriente, el exconstituyente y poco exitoso dirigente deportivo, Eduardo Maruri.

Más nombres: la desconocida candidata socialista, Elsa Guerra, única mujer que se postularía. En la Izquierda Democrática se bajó el excandidato Xavier Hervas, que se postularía por Sociedad Patriótica. Surgió el nombre del expresidente del legislativo, Virgilio Saquicela (por suerte, solo intentará volver a la asamblea). El exvicepresidente Otto Sonnenholzner dejó la zona de confort. También la versión millenial de Alvarito, su hijo Daniel, aunque está pendiente la sexta candidatura del empresario bananero.

La Conaie resolvió: su candidato odia la democracia y tomaría el poder por la fuerza para instalar el comunismo indoamericano. De Leonidas Iza lo que se espera es un ‘Pol Pot criollo’, que desbaratará cualquier elección -como las internas de Pachakutik- si está en desacuerdo con los resultados electorales. Por la misma línea, con otros apoyos, estará Yaku Pérez.

Los correístas se frotan las manos con tantos candidatos. Están seguros que repetirán el resultado de febrero, pongan a quien pongan. Arauz, Marcela Aguiñaga, Rabascall, Luisa González o Aquiles Álvarez son sus cartas. Con ellos vendrá, no solo una década perdida sino, quizás, muchas más. ¿Eso es lo que querías, pueblo ecuatoriano?