Ugo Stornaiolo
Aunque después de leer esto, volverá a despotricar contra ‘la prensa corrupta’, ‘los sicarios de tinta’, ‘la gordita horrorosa’ (QEPD) o ‘los pitufos’ y sentirá que es víctima de incomprensión, del lawfare o de cualquier insensatez que se inventan los acusados por corrupción de los gobiernos del socialismo del siglo XXI, ya no quedan dudas: usted es y será una mala persona.
Qué decir de Cristina Fernández (que quisiera volver a ser presidenta, para mantener su inmunidad, pese a las sentencias en su contra por corrupción), de Lula da Silva (que logró ser nuevamente mandatario, pese a que siguen en firme sus acusaciones), de su gran amigo Hugo Chávez (cuya alma debe vagar cerca del infierno) o del impresentable Nicolás Maduro (que tras haber quebrado Venezuela sigue buscando amañar las próximas elecciones de su país). Y qué decir de sus camaradas Ortega y Díaz Canel, “dictadores perpetuos” de Nicaragua y Cuba, o del genocida ruso Vladimir Putin (que le tuvo haciendo entrevistas en RT).
¿Esto es lo que quiere expresidente? Volver al país para ser declarado santo de los altares políticos ecuatorianos, perdonado de todas las culpas gracias a los organismos que creó en Montecristi (como el CPCCS) o los que cooptó en sus diez años de dominio. ¿Para eso había que bajarse a Lasso y que haya muerte cruzada? Como le encanta vivir en elecciones, sus compinches ya están listos y seguros de su triunfo, con apenas 25% de votos. El problema es que, aunque se muera por serlo, los fallos en su contra le impiden ser candidato, por ahora. Más adelante, quién sabe…
¿Para eso tiene jueces payasos que liberan delincuentes, al bufón Terán como presidente de la Judicatura y tenía a pandilleros y truhanes como asambleístas? ¿Para eso quiere volver y cree que todo va a mejorar con un chasquido de dedos? No hay duda de que usted es un líder de sus masas. Sabe lo que debe hacer para mantener atontada a una parte de la población. Pero, usted es una mala persona, que quiere volver solo para vengarse.
Su vida está llena de amargura y de rencor y lo ha contagiado a los ecuatorianos, que viven en polarización y desconfianza. Cree que haciendo daño todo va a mejorar. Creó un país de enemigos, de malandros que matan, de violencia, de jueces de medio pelo que liberan delincuentes ¿Es el modelo de país que usted quiere? ¿una “democracia” tipo Cuba, Venezuela y Nicaragua o que el Ecuador sea como Argentina o Venezuela? ¿ese es el socialismo que quiere para el país? Ojalá que a usted le salga todo mal, por el bien del país.