El PSC debe reinventarse

En la sesión solemne para celebrar a Guayaquil hubo un gran ausente, el exalcalde y líder de los socialcristianos Jaime Nebot.

Más allá de su carta excusándose con la alcaldesa Cinthya Viteri, en la cual indicaba que se encuentra fuera del país, es inevitable especular que la ruptura con el presidente Guillermo Lasso, quien sí concurrió al evento, es irreparable y pudo haber sido la causa de su ausencia. Seguramente Nebot debe estar pensando seriamente sobre el futuro de su partido político, que hoy en día cuenta con ‘desertores’ dentro y fuera de la Asamblea. Algunos prefirieron pasarse al oficialismo mientras otros antepusieron sus intereses a los del partido.

Nebot hoy vive ‘camisetazos’ y deslealtades que tal vez nunca imaginó y que, sin embargo, lo ponen ante una drástica encrucijada de la cual podría depender inclusive la sobrevivencia de su partido: mantener la actual línea sobria y reaccionaria, o refundar y dinamizar al partido. Ya hemos sido testigos de cómo las malas decisiones y la total improvisación han decretado el colapso político de organizaciones como Alianza País, una lección para aquellas organizaciones que a pesar de tener una gran trayectoria histórica podrían dejar de influir dentro de los acontecimientos nacionales.

Tal vez para el PSC y su líder ha llegado la hora de renovarse y de tener el valor de pasar la página antes de que el gobierno lo haga por ellos. Es verdad que Lasso y sus asambleístas muy pronto se darán cuenta del grave error político que cometieron al aliarse con fuerzas políticas que le harán imposible gobernar, pero también el PSC debe encontrarse listo para los nuevos desafíos del país y para las nuevas coyunturas que muy pronto llevarán al presidente a buscar otros aliados.

Si Nebot quiere seguir siendo el referente político de los socialcristianos debe volver activamente a la política; exponerse, oponerse y, por último, comunicar con contundencia. Caso contrario, urge escoger a un nuevo líder que, siendo leal a los principios y visión del PSC, sea al mismo tiempo más entregado y comprometido con el país. Hay mucho que hacer casa adentro.