El libro de Mahuad

El expresidente Jamil Mahuad aún exhibe al escribir la misma jovialidad, claridad y soltura que lo caracterizaba ante las cámaras. “Así dolarizamos al Ecuador” lleva al lector de vuelta a una de las épocas más oscuras del país. Se podría definir a la obra como una justa e inoportuna serie de excusas.

Es justa porque vale recordar cuán precaria era la situación del país cuando Mahuad ascendió. Narra detalladamente la inminencia de una guerra total con el Perú, algo que entonces y ahora los políticos han tenido la delicadeza de mantener en reserva. Recuerda la serie de desafortunados eventos externos que pusieron al país de rodillas y cómo la crisis bancaria no fue creada, sino heredada. Es inoportuna porque, aunque se debe recordar los duros desafíos que enfrenta un gobernante, no se ve bien que sea este quien lo haga. Es mejor dejar que sean otros los apologetas o, como Arroyo del Río, hacerlo de forma póstuma.

El libro tiene trechos muy valiosos. Destaca cuán discutida y resistida fue la opción de la dolarización, sobre todo por importantes personalidades del Congreso y del Banco Central. En tanto esta estuvo inspirada en la convertibilidad argentina, resulta irónico  que el caso ecuatoriano haya sobrevivido y el argentino fracasado estrepitosamente. Lo que no queda claro es quiénes ni por qué, por medio de la Ley Trole 1, le asignaron al Banco Central el confuso papel en la dolarización que distorsiona la economía hasta hoy. Llama la atención la negativa, con sabor a maldad, del FMI a socorrer a Ecuador, cuya narración genera angustia.

Lo mejor del libro, por mucho, es la descripción del burdo proceso judicial del que ha sido víctima el expresidente y la farsa que han sido las investigaciones resultantes. Nos recuerda que el país, por culpa del manejo propagandístico y politiquero, aún está muy lejos de conocer y entender la verdad sobre esa crisis. Lo peor es la despiadada extensión; hubiese podido acortarse considerablemente sacrificando un poco de autocomplacencia y su obsesión por hablar de Harvard, y dejando los trechos de cursis consejos de autoayuda para otra obra.

El elefante en el cuarto es la interrogante sobre su estado de salud y cuánto influyó este en sus decisiones. Que vengan los siguientes.