Deporte y realidad

¿Para qué sirven las asociaciones, federaciones y comités deportivos? Sencilla respuesta: para que sus dirigentes ganen en imagen pública, luego se catapulten a la política nacional o regional y para que viajen por el mundo.

¿Para qué sirven los deportistas sin apoyo? Para demostrar que el deporte es una práctica que si no se hace de manera profesional, con administración y soporte económico, no sirve para nada sino apenas para que los dirigentes se tomen la foto.

La situación de los deportistas es similar a la de los artistas. Siempre tienen un gremio, asociación o como se llame que, en lugar de beneficiar a quienes se dedican a ese ámbito productivo y de profesión se convierte para sus dirigentes en una oportunidad parasitaria de la que vivir por décadas.

El fútbol, por ejemplo, es un deporte de corte privado, que tiene una federación que gasta millones de dólares, en el cual las empresas meten su plata para financiar, en muchos casos, las carreras de jóvenes que no han cultivado nada más que sus piernas. Con el pretexto que es el rey de los deportes, masivo, el más popular, han hecho lo que han querido, pero los jugadores también han callado porque se han beneficiado.

Los verdaderos deportistas están en las otras disciplinas, pero allí no siempre están los verdaderos dirigentes, que han hecho de las federaciones sus reductos de poder, de negocio y de prebendas. ¿Cuántos ex dirigentes son políticos?

Atletismo, natación, ciclismo, halterofilia, ajedrez, marcha, son los deportes que nos han dado glorias y satisfacciones como país, con representaciones nacionales, que bien podemos decir que se hicieron solos, a pulso.

Las declaraciones de nuestro campeón olímpico son realidades que ofenden a pocos, pero que dan la razón a muchos deportistas. Hay quienes tienen el potencial pero el país está ciego en otras disciplinas que son las populares, como en las artes.

Gracias, Richard, por decir las cosas como son.