Cultura del silencio

El pensar es parte de la naturaleza humana. Con seguridad esas grandes cavilaciones pueden ser acertadas, arbitrarias, distorsionadas y hasta erradas; sin embargo, son construcciones propias que no todos las dicen.

Exactamente, el problema está en que no las decimos, estructuramos silencios en grado sumo proyectando un Ecuador sin sapiencia, libertad y democracia.

Indudablemente los silencios, no son forjados por nosotros mismos, hay impedimentos provocados con o sin intención por parte de grupos sociales y económicos dominantes. No practicamos derechos: hablar, escribir, actuar y hasta pensar, conformando una Cultura del Silencio…desesperante.

Escribiendo, desde nuestra posición de maestros o como simples ciudadanos, creemos que el modelo educativo que define el futuro de niños y adolescentes está errado, hay que cambiarlo con un nuevo paradigma, no inventado. En muchas naciones prósperas lo tienen claro.

Para iniciar, hay que formar maestros críticos que: formulen dentro y fuera del aula preguntas claras y precisas, acumulen información relevante, lleguen a conclusiones y soluciones viables, piensen con mente abierta, se comuniquen adecuadamente, sean disciplinados, practiquen un escepticismo sano, sean humildades intelectualmente y honestos. Es decir, se ubiquen dentro de su accionar social: criticando, juzgando y ayudando, con una proporcionalidad adecuada, según el tema y los procesos.

A la primera educadora, la Ministra de Educación, hay que decirle: olvide del no parecer, sí del ser; del no pensar en vivir, sí el de convivir y  el de no atender al yo, sí el nosotros.

Recordarle lo de Steve Jobs: “Las grandes cosas nunca se llevan a cabo (sic) por una sola persona, sino por un grupo de personas”, aplicable a los grandes retos que tiene, comentados tiempos atrás. Pero, especialmente uno: la conformación y funcionamiento del Consejo Nacional de Educación, que nunca actúo  ni con Correa ni Moreno, hoy con dos instancias: consulta y veeduría, importantes si actúan.

Esperemos, no al instante…pero ya.