Ciudad Gótica, pero sin Batman

José Alvear

Es indignante ver a los supuestos líderes del país actuar como unos completos payasos, mientras el país se asemeja a Ciudad Gótica, con la diferencia de que hay varios Jokers, pero no existe Batman.

Sí, vivir en Ecuador se está convirtiendo en una realidad terrorífica. Según datos del Ministerio del Interior, solamente en enero de este año se registraron 162 muertes violentas, 58 de ellas, en Guayaquil. Esa cifra récord superó en un 60% al número de enero de 2022, que era de 100. Resulta aún más triste revisar el dato del mismo mes del año 2019: 18 fallecimientos por la violencia.

Indolentes con lo que vive Ecuador, las fuerzas políticas, representadas en la Asamblea y sus voceros, se encuentran más interesadas en sus cálculos egoístas y no en el país. Empecemos con el primer Joker de esta película de terror, Leonidas Iza, quien amenaza con paralizar de nuevo el país. Y es importante recordar que, la última vez, ese mismo capricho del ‘líder indígena’ le costó al país aproximadamente $1.000 millones. El señor Iza disfraza sus intereses individuales y políticos con la máscara de los derechos de los más débiles, pero el país no es tonto.

Por otro lado, el prófugo en Bélgica, este Joker oportunista que saca nuevamente las garras. Ahora, que siente una aparente fuerza busca  atentar contra la democracia, desestabilizando con sus mensajes a un Gobierno que, aunque resulta nefasto, ganó su derecho en las urnas y tiene como deber y obligación pública cumplir sus promesas de campaña.

Claro está, no podemos olvidar al gran perdedor de Guayaquil. Este Joker que a sus casi 80 años comienza a despedirse de la política por la puerta trasera, con pésimos y clásicos manejos de la vieja casta, que el nuevo electorado rechaza. El típico insulto, la ofensa constante y, sobre todo, la falta de gestión, le llevaron a perder su hegemonía de 30 años.

Además, el nerviosismo que generan los caudillos ha sido uno de los importantes responsables de que el riesgo país, al 16 de febrero de 2023, alcance los 1.632 puntos. Es decir, al nivel del registrado durante el paro de octubre de 2022.

El país vive momentos de desidia, desorden e inseguridad gracias a estos políticos irresponsables, que manejan la institucionalidad del país con el estómago, y no a través de coaliciones inteligentes, estructuradas y beneficiosas para la gente.

Lo cierto es que, lamentablemente, nuestro Ecuador cada vez se acerca más a una Ciudad Gótica donde abundan los villanos parecidos al Joker, mientras estamos en manos de un Presidente que, en lugar de parecerse a Batman o ser el líder que se necesita en estos momentos, resulta una combinación de Pinocho con Gasparín: mentiroso, invisible y blandengue.