“Los imperios perfumados/ olorosos y obscenos,/ las sórdidas claves de las bóvedas,/ las nítidas oficinas nauseabundas,/ oro, portafolio, papel de hilo,/ putrefactas límpidas alfombras,/ refulgentes conciliábulos/, seda y cuello blanco,/ impecable asco con el nombre de sagrada institución”. Asco es la palabra de este poema llamado “Sacros” que escribí hace años y le calza hoy a la Asamblea que metió en el mismo saco de la amnistía a justos y a pecadores, delincuentes y grilleteados, sin analizar caso por caso. ¿Qué gobernabilidad quieren lograr cuando han puesto como negociación al sufrimiento de Quito y de la Patria?
Señor asambleísta Fernando Villavicencio, usted, que padeció todos los hostigamientos de la prepotencia política en carne propia, ha ratificado la impunidad. ¡Qué desencanto! ¿Está bien amnistiar el incendio de la Contraloría que arrasó con los informes de responsabilidad penal de corruptos sin haber establecido sus múltiples responsabilidades? ¿Está bien amnistiar a quienes crearon escenarios de guerra civil y que ese precedente quede como una perversa amenaza? ¿Está bien que, a nombre de la legítima protesta social, se permitan excesos de civiles y uniformados y territorios arrasados?
Ningún exceso aplaude Quito ni tampoco el insulto al sentido común al pretender reducir ese octubre a una “dizque” espontánea protesta social. El terror que vivió la población, los abusos sexuales a mujeres policías, el ataque a periodistas y a instalaciones fundamentales, la incursión y saqueo a barrios, la destrucción de vehículos, ambulancias, quema de UPCs, locales comerciales y restaurantes, la quiebra del Centro Histórico de Quito, destrucción del patrimonio que es legado cultural de todos y los muertos y heridos no importaron a los asambleístas. Le queda a la ciudadanía la resistencia pacífica y creativa y opciones jurídicas. El destacado escritor Simón Zavala sostiene lo que millones de ecuatorianos pensamos ante tanto asco: “Hay que obtener la lista de quienes votaron a favor y de quienes se abstuvieron y tramitar la revocatoria del mandato de esos asambleístas.”