Yunda ante la élite

¿El apellido Yunda le dio cólicos a la élite quiteña? Esto no quita que hay muchas cosas turbias en la gestión del Distrito Metropolitano de Quito. ¿En serio vamos a clasificar al ciudadano Yunda como de clase social media o baja? Recordemos todo el conflicto de intereses alrededor de las frecuencias radiales y su patrimonio anterior.

Un concejo municipal como el que destituyó al ciudadano Yunda cree que ha solucionado el problema del municipio de Quito. Este concejo empezó viciado por irregularidades como la paridad de género para la elección de la Vicealcaldí. Esta vez se siguió el proceso jurídico previsto en el COOTAD, que se ha dado todos los pasos que están facultados al nivel legislativo para la destitución del alcalde.

Esto deja varias lecciones.

Una gestión pública no puede seguir contando con gente improvisada que no sepa de materia pública.

En materia pública se hace estrictamente lo que determina la ley y aunque los procesos para la destitución a mi juicio están correctos en el marco de la ley, esto no quita todo el desperdicio de tiempo que tuvieron los concejales.

Los procesos de fiscalización y control se desarrollan en un ámbito más cercano a los intereses políticos que al normal procedimiento técnico de valoración y presunción de la gestión pública.

Se nota claramente que frente a la fragmentación política que significó las pasadas elecciones para Alcalde de Quito, la ciudadanía se alejó del control social.

Señor Yunda, por supuesto que esto pasa por intereses políticos, mismos que no supo dirigir, gestionar y administrar; también pasa por su desconocimiento y por dejar que otros usen su nombre para dirigir el cabildo; por desconocer los proyectos de la capital y dedicarse a lo que muchos acostumbran, al clientelismo y paternalismo, ¡condiciones que debemos desechar de una vez por todas de toda la gestión pública!

Edison Mafla