Inventada y onerosa revisión vehícular

Muchos ecuatorianos y, especialmente los quiteños,  se vienen quejando a diario, de los múltiples requerimientos y problemas que se ven obligados a soportar para realizar la inventada y onerosa revisión vehicular. Son trámites tan tediosos, largos y pacienzudos  que los usuarios tienen que pasar mañanas o días enteros para cumplir con estas imposiciones;  sin anotar lo costoso que resulta, pues cada día se inventan nuevos impuestos, desconociéndose a dónde van a parar estos rubros y, menos aún, en que se los invierte. Sin tomar en cuenta que la gran mayoría de ciudadanos ahorra sus centavos y sacrifica a su familia  para adquirir un vehículo,  no como artículo de lujo sino como un instrumento de trabajo que le permita subsistir, al menos en esta época de crisis.

La gente se pregunta:

¿No existirá otro mecanismo más simple para cumplir con estas obligaciones?  Pues, en la forma como se lo  viene haciendo, el sufrido propietario, a más de su dinero, pierde su tiempo, su tranquilidad y su paciencia.

Fabiola Carrera Alemán