Los responsables de los actos terroristas de octubre 19 de 2021, con Leonidas Iza y Jaime Vargas a la cabeza, que destruyeron edificios y otros bienes de la capital, a más de haber agredido la dignidad y la paz de los quiteños y el país entero, no han sido juzgados aún. Esto incluiría la reposición de los millonarios perjuicios ocasionados al erario nacional. Es claro que se había planificado un golpe de Estado con la colaboración de instituciones públicas y privadas que ‘comedidamente’ hospedaron a los sediciosos, con la intención de allanar el retorno del prófugo del ático.
Quizás la demora en los procesos judiciales relacionados con tan nefastos hechos, les ha hecho creer que quedarán impunes, y por eso, sin vergüenza, convocan a una nueva marcha.
Bien haría el movimiento indígena en adoptar una estrategia coherente para integrarse a una convivencia racional y pacífica con los otros sectores de la sociedad, y compartir la responsabilidad de salvar al país de la crisis económica y social.
Leonardo Cueva Piedra