Aumentar los cupos en las universidades

El presidente Lasso ofreció en campaña cambiar la forma de ingresar a las universidades del Estado y en julio de 2021 envió a la Asamblea Nacional un proyecto de reformas a la educación superior que duerme un injusto mal sueño. Mientras tanto, miles son los bachilleres que volverán a ser excluídos de las universidades públicas, tanto por el examen de ingreso en sí y por la existencia de cupos para seguir carreras de su preferencia. Por los cupos, a los aprobados se les obliga, entonces, a seguir carreras que no son de su preferencia. Deben optar otras carreras opcionales, sin que sean las de su vocación real, por lo que un alto número acaba desertando de estas.

Las autoridades universitarias deben ser sensibles a esta realidad e incrementar los cupos a las carreras, para los próximos ingresos, hasta que se apruebe la nueva ley. No
es válido el argumento de que es imposible hacerlo con los actuales recursos, puesto que
basta recorrer por las aulas de cualquier universidad del país y se verá que hay mucho
espacio y bancas sin utilizarse.

No puede ser posible que una innovadora y nueva universidad, como la de Milagro, reciba más estudiantes que las emblemáticas universidades públicas de Guayaquil, Quito y Cuenca, con más recursos y más historia. El ejemplo de la universidad de Milagro debe seguirse hasta que sea realidad un justo acceso generalizado a la educación superior.

¡Debe haber sensibilidad ante esa situación que compromete el futuro del país! Impedir el ingreso a la mayoría de nuevos bachilleres destroza su autoestima y la posibilidad de que, con un título profesional, sean más útiles a ellos mismos y de servir mejor a su país y a sus familias. Para los pobres, la educación es la mejor vía de mejoramiento social. Según cifras del SENESYT, fueron excluídos más de un millón de jóvenes en su aspiración de estudiar en las universidades. Esperemos que esta situación se supere, lo más pronto posible, lo cual será beneficio, mayormente, para las familias pobres del Ecuador.

Wilson Sánchez Castello