Assange empieza a presentar sus testigos

Redacción LONDRES

Julian Assange, enternado y con su pelo blanco muy corto, se presentó ayer en la sala 10 del tribunal penal londinense de Old Bailey, para confirmar que rehúsa ser extraditado a suelo estadounidense, donde se enfrenta a 18 cargos de espionaje y conspiración por intrusión informática, penados con hasta 175 años de cárcel.

Según el fiscal Joel Smith, en representación de EE.UU., el acusado colaboró con piratas informáticos e intentó reclutar a otros con un llamamiento para obtener «las filtraciones más buscadas».

Ayer declaró el primer testigo de la defensa, el historiador del periodismo Mark Feldstein, de la universidad de Maryland, que sostuvo que las acusaciones tienen «motivaciones políticas».