Jenny Pérez: “Quienes vivimos al día, debemos seguir trabajando”

VENTA. Jenny Pérez se instala todas las mañanas en la parte exterior del Mercado Cerrado.
VENTA. Jenny Pérez se instala todas las mañanas en la parte exterior del Mercado Cerrado.

Para algunos comerciantes quedarse en casa a esperar que la crisis sanitaria se supere no es la mejor opción, necesitan generar recursos para poder sobrevivir y mantenerse mientras la situación avanza. Jenny Pérez es una comerciante que trabaja cerca de cinco años al interior del Mercado Cerrado de Latacunga, ofrece el servicio de tareas dirigidas y trabajos en computadora para los hijos de las comerciantes, a raíz de la emergencia sanitaria y la suspensión de clases, se dio cuenta de que su labor ya no iba a generar recursos; por lo que decidió cambiar de negocio, de manera temporal.

Se abasteció de guantes, mascarillas, alcohol, y gel antibacterial, vendía estos productos en su puesto al interior del mercado. Al inicio, no todas las personas compraban porque no era obligatorio ingresar con tanta protección; sin embargo, las cosas desde mediados de la semana anterior cambiaron y eso significó para Jenny un aumento en sus recursos diarios.

Hoy, instaló su puesto en la parte exterior del mercado y es la única comerciante que ofrece guantes y mascarillas para que la gente pueda ingresar, caso contrario no lo pueden hacer.

“Venga, venga lleve sus guantes y mascarilla”, es el llamado que hace Jenny a la gente que llega para abastecerse de productos. Y, aunque siempre está con su mascarilla se puede evidenciar su amabilidad por sus palabras y por la cortesía con la que atiende a las personas. También lleva guantes y dice que está totalmente protegida.

Esta mujer de 49 años de edad tiene tres hijas, una ya es profesional y la otra está por graduarse, pero todavía tiene que seguir educando a su tercera hija y para eso necesita recursos y si bien su esposo también trabaja, considera que nunca está demás un dinero extra. Así, en estos días, la venta de estos implementos, que por ahora son necesarios, le ayuda para llevar la comida a su casa y seguir subsistiendo.

“Los que vivimos al día no podemos quedarnos en casa esperando que pase la emergencia, pero, estamos conscientes de que la situación es difícil y por eso tomamos todas las precauciones para seguir laborando, siempre respetando los pedidos de la autoridad y los horarios establecidos”, dijo.

Desde las 07:00 hasta las 11:30 o 12:00 permanece en las afueras del mercado, asegura que mientras no haya otras disposiciones seguirá trabajando, pero si ya ve que la situación se complica aún más ya no saldrá de casa.

Como esta mujer, se ve a varios comerciantes en las calles que venden productos y aunque muchos prefieren no hablar, solo manifiestan que deben sobrevivir y no pueden quedarse en su casa.

Hoy en la mañana el movimiento fue mayor en los supermercados, tiendas y farmacias de la ciudad, la gente aprovecha las primeras horas del día para salir a comprar lo que necesita, porque desde las 14:00 inicia el toque de queda. (VHG)