El desperdicio de alimentos en el país es alarmante

Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.
Problemática. Solo en Quito se estima que se desperdician más de 100 toneladas diarias de alimentos.

¿Cuántas veces ha dejado una fruta a medio comer o ha preparado más comida de la que en verdad iba a consumir? Estas prácticas son muy comunes y ocasionan que un tercio de todos los alimentos que se producen en el mundo se desperdicien.

Esto ocurre mientras 821 millones de personas pasan hambre en el planeta, según advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).

La realidad que se vive a escala global es preocupante, pero investigadores de la Escuela Politécnica Nacional, advierten que Ecuador está en la lista de países latinoamericanos que más desperdicia alimentos. “Ese absurdo desperdicio ocurre a pesar de que el 24,5% de los ecuatorianos vive en condiciones de pobreza, extrema pobreza e indigencia”, se señala en un informe de este centro de estudios superiores.

A escala nacional la problemática acarrea grandes pérdidas. El Ministerio de Agricultura y Ganadería y la FAO elaboraron un ‘Diagnóstico cualitativo y cuantitativo sobre la Situación de las Pérdidas y Desperdicios de Alimentos en Ecuador’.

En el estudio se indica que la pérdida anual por desperdicios de alimentos es de 939.000 toneladas métricas. Esto, contando únicamente las fases de producción, cosecha y almacenamiento y no las correspondientes a la industrialización, comercio o sobras en espacios como patios de comidas o restaurantes.

El tesoro de otros
En el estudio se estima que la pérdida por desperdicios de alimentos asciende a $334 millones. Esa cifra alcanzaría para dar de comer a 1,5 millones de personas, según la FAO.

EL DATO
Con la asesoría de los bancos de alimentos de Quito y Guayaquil, Guaranda y Ambato intentan sumarse a la iniciativa.Esta situación ocurre en un país en el que 1,3 millones de habitantes están subalimentados, es decir, que lo que comen no cubre la demanda energética mínima para lleven una vida saludable.

La cifra de desperdicio de alimentos no ha aumentado en los últimos tres años, pero el organismo internacional considera urgente disminuir los índices.

Para la nutricionista, Angie Olarte, el desperdicio de comida está arraigado en el ideario social. “Son prácticas comunes y naturalizadas como botar un plátano a la basura porque tiene una parte más oscura. Eso se hace en lugar de cortar esa parte, y consumir el resto. O ir a un restaurante y no pedir para llevar cuando sobra comida”. (AVV)

En Ecuador hay cuatro bancos de alimentos
° Impulsar acciones concretas que permitan combatir el hambre es uno de los objetivos de los cuatro bancos de alimentos que hay en el país. Dichos centros están en Quito, Guayaquil, Loja y Cuenca.

Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, comenta que en estos sitios se encargan de acopiar y seleccionar alimentos recibidos en donación. Se trata de comida que se encuentra en óptimas condiciones, pero que ha llegado al final del ciclo de comercialización y generalmente se desperdicia. Esas donaciones se distribuyen luego a instituciones que trabajan con personas en situación de vulnerabilidad alimentaria.

Guevara indica que, hasta septiembre de este año, han recuperado más de 2 millones de kilos de alimento. Eso equivalen a 5 millones de raciones.

¿Cómo evitar el desperdicio?
° Dentro del hogar, Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, recomienda hacer menús. “A veces compramos lo que creemos que vamos a usar, pero se desperdicia”, lo ideal es tener una lista de los productos de la semana para que todo se termine y no se desperdicie.

En el caso de las empresas llevan el mensaje de que hay varios beneficios por evitar el desperdicio. “Además de ser un aporte social y ambiental también hay un beneficio económico, pues cuando se desechan cantidades grandes de alimentos se deben enviar a incineración y eso cuesta $1.400 por tonelada”.

¿Cuántas veces ha dejado una fruta a medio comer o ha preparado más comida de la que en verdad iba a consumir? Estas prácticas son muy comunes y ocasionan que un tercio de todos los alimentos que se producen en el mundo se desperdicien.

Esto ocurre mientras 821 millones de personas pasan hambre en el planeta, según advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).

La realidad que se vive a escala global es preocupante, pero investigadores de la Escuela Politécnica Nacional, advierten que Ecuador está en la lista de países latinoamericanos que más desperdicia alimentos. “Ese absurdo desperdicio ocurre a pesar de que el 24,5% de los ecuatorianos vive en condiciones de pobreza, extrema pobreza e indigencia”, se señala en un informe de este centro de estudios superiores.

A escala nacional la problemática acarrea grandes pérdidas. El Ministerio de Agricultura y Ganadería y la FAO elaboraron un ‘Diagnóstico cualitativo y cuantitativo sobre la Situación de las Pérdidas y Desperdicios de Alimentos en Ecuador’.

En el estudio se indica que la pérdida anual por desperdicios de alimentos es de 939.000 toneladas métricas. Esto, contando únicamente las fases de producción, cosecha y almacenamiento y no las correspondientes a la industrialización, comercio o sobras en espacios como patios de comidas o restaurantes.

El tesoro de otros
En el estudio se estima que la pérdida por desperdicios de alimentos asciende a $334 millones. Esa cifra alcanzaría para dar de comer a 1,5 millones de personas, según la FAO.

EL DATO
Con la asesoría de los bancos de alimentos de Quito y Guayaquil, Guaranda y Ambato intentan sumarse a la iniciativa.Esta situación ocurre en un país en el que 1,3 millones de habitantes están subalimentados, es decir, que lo que comen no cubre la demanda energética mínima para lleven una vida saludable.

La cifra de desperdicio de alimentos no ha aumentado en los últimos tres años, pero el organismo internacional considera urgente disminuir los índices.

Para la nutricionista, Angie Olarte, el desperdicio de comida está arraigado en el ideario social. “Son prácticas comunes y naturalizadas como botar un plátano a la basura porque tiene una parte más oscura. Eso se hace en lugar de cortar esa parte, y consumir el resto. O ir a un restaurante y no pedir para llevar cuando sobra comida”. (AVV)

En Ecuador hay cuatro bancos de alimentos
° Impulsar acciones concretas que permitan combatir el hambre es uno de los objetivos de los cuatro bancos de alimentos que hay en el país. Dichos centros están en Quito, Guayaquil, Loja y Cuenca.

Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, comenta que en estos sitios se encargan de acopiar y seleccionar alimentos recibidos en donación. Se trata de comida que se encuentra en óptimas condiciones, pero que ha llegado al final del ciclo de comercialización y generalmente se desperdicia. Esas donaciones se distribuyen luego a instituciones que trabajan con personas en situación de vulnerabilidad alimentaria.

Guevara indica que, hasta septiembre de este año, han recuperado más de 2 millones de kilos de alimento. Eso equivalen a 5 millones de raciones.

¿Cómo evitar el desperdicio?
° Dentro del hogar, Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, recomienda hacer menús. “A veces compramos lo que creemos que vamos a usar, pero se desperdicia”, lo ideal es tener una lista de los productos de la semana para que todo se termine y no se desperdicie.

En el caso de las empresas llevan el mensaje de que hay varios beneficios por evitar el desperdicio. “Además de ser un aporte social y ambiental también hay un beneficio económico, pues cuando se desechan cantidades grandes de alimentos se deben enviar a incineración y eso cuesta $1.400 por tonelada”.

¿Cuántas veces ha dejado una fruta a medio comer o ha preparado más comida de la que en verdad iba a consumir? Estas prácticas son muy comunes y ocasionan que un tercio de todos los alimentos que se producen en el mundo se desperdicien.

Esto ocurre mientras 821 millones de personas pasan hambre en el planeta, según advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).

La realidad que se vive a escala global es preocupante, pero investigadores de la Escuela Politécnica Nacional, advierten que Ecuador está en la lista de países latinoamericanos que más desperdicia alimentos. “Ese absurdo desperdicio ocurre a pesar de que el 24,5% de los ecuatorianos vive en condiciones de pobreza, extrema pobreza e indigencia”, se señala en un informe de este centro de estudios superiores.

A escala nacional la problemática acarrea grandes pérdidas. El Ministerio de Agricultura y Ganadería y la FAO elaboraron un ‘Diagnóstico cualitativo y cuantitativo sobre la Situación de las Pérdidas y Desperdicios de Alimentos en Ecuador’.

En el estudio se indica que la pérdida anual por desperdicios de alimentos es de 939.000 toneladas métricas. Esto, contando únicamente las fases de producción, cosecha y almacenamiento y no las correspondientes a la industrialización, comercio o sobras en espacios como patios de comidas o restaurantes.

El tesoro de otros
En el estudio se estima que la pérdida por desperdicios de alimentos asciende a $334 millones. Esa cifra alcanzaría para dar de comer a 1,5 millones de personas, según la FAO.

EL DATO
Con la asesoría de los bancos de alimentos de Quito y Guayaquil, Guaranda y Ambato intentan sumarse a la iniciativa.Esta situación ocurre en un país en el que 1,3 millones de habitantes están subalimentados, es decir, que lo que comen no cubre la demanda energética mínima para lleven una vida saludable.

La cifra de desperdicio de alimentos no ha aumentado en los últimos tres años, pero el organismo internacional considera urgente disminuir los índices.

Para la nutricionista, Angie Olarte, el desperdicio de comida está arraigado en el ideario social. “Son prácticas comunes y naturalizadas como botar un plátano a la basura porque tiene una parte más oscura. Eso se hace en lugar de cortar esa parte, y consumir el resto. O ir a un restaurante y no pedir para llevar cuando sobra comida”. (AVV)

En Ecuador hay cuatro bancos de alimentos
° Impulsar acciones concretas que permitan combatir el hambre es uno de los objetivos de los cuatro bancos de alimentos que hay en el país. Dichos centros están en Quito, Guayaquil, Loja y Cuenca.

Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, comenta que en estos sitios se encargan de acopiar y seleccionar alimentos recibidos en donación. Se trata de comida que se encuentra en óptimas condiciones, pero que ha llegado al final del ciclo de comercialización y generalmente se desperdicia. Esas donaciones se distribuyen luego a instituciones que trabajan con personas en situación de vulnerabilidad alimentaria.

Guevara indica que, hasta septiembre de este año, han recuperado más de 2 millones de kilos de alimento. Eso equivalen a 5 millones de raciones.

¿Cómo evitar el desperdicio?
° Dentro del hogar, Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, recomienda hacer menús. “A veces compramos lo que creemos que vamos a usar, pero se desperdicia”, lo ideal es tener una lista de los productos de la semana para que todo se termine y no se desperdicie.

En el caso de las empresas llevan el mensaje de que hay varios beneficios por evitar el desperdicio. “Además de ser un aporte social y ambiental también hay un beneficio económico, pues cuando se desechan cantidades grandes de alimentos se deben enviar a incineración y eso cuesta $1.400 por tonelada”.

¿Cuántas veces ha dejado una fruta a medio comer o ha preparado más comida de la que en verdad iba a consumir? Estas prácticas son muy comunes y ocasionan que un tercio de todos los alimentos que se producen en el mundo se desperdicien.

Esto ocurre mientras 821 millones de personas pasan hambre en el planeta, según advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).

La realidad que se vive a escala global es preocupante, pero investigadores de la Escuela Politécnica Nacional, advierten que Ecuador está en la lista de países latinoamericanos que más desperdicia alimentos. “Ese absurdo desperdicio ocurre a pesar de que el 24,5% de los ecuatorianos vive en condiciones de pobreza, extrema pobreza e indigencia”, se señala en un informe de este centro de estudios superiores.

A escala nacional la problemática acarrea grandes pérdidas. El Ministerio de Agricultura y Ganadería y la FAO elaboraron un ‘Diagnóstico cualitativo y cuantitativo sobre la Situación de las Pérdidas y Desperdicios de Alimentos en Ecuador’.

En el estudio se indica que la pérdida anual por desperdicios de alimentos es de 939.000 toneladas métricas. Esto, contando únicamente las fases de producción, cosecha y almacenamiento y no las correspondientes a la industrialización, comercio o sobras en espacios como patios de comidas o restaurantes.

El tesoro de otros
En el estudio se estima que la pérdida por desperdicios de alimentos asciende a $334 millones. Esa cifra alcanzaría para dar de comer a 1,5 millones de personas, según la FAO.

EL DATO
Con la asesoría de los bancos de alimentos de Quito y Guayaquil, Guaranda y Ambato intentan sumarse a la iniciativa.Esta situación ocurre en un país en el que 1,3 millones de habitantes están subalimentados, es decir, que lo que comen no cubre la demanda energética mínima para lleven una vida saludable.

La cifra de desperdicio de alimentos no ha aumentado en los últimos tres años, pero el organismo internacional considera urgente disminuir los índices.

Para la nutricionista, Angie Olarte, el desperdicio de comida está arraigado en el ideario social. “Son prácticas comunes y naturalizadas como botar un plátano a la basura porque tiene una parte más oscura. Eso se hace en lugar de cortar esa parte, y consumir el resto. O ir a un restaurante y no pedir para llevar cuando sobra comida”. (AVV)

En Ecuador hay cuatro bancos de alimentos
° Impulsar acciones concretas que permitan combatir el hambre es uno de los objetivos de los cuatro bancos de alimentos que hay en el país. Dichos centros están en Quito, Guayaquil, Loja y Cuenca.

Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, comenta que en estos sitios se encargan de acopiar y seleccionar alimentos recibidos en donación. Se trata de comida que se encuentra en óptimas condiciones, pero que ha llegado al final del ciclo de comercialización y generalmente se desperdicia. Esas donaciones se distribuyen luego a instituciones que trabajan con personas en situación de vulnerabilidad alimentaria.

Guevara indica que, hasta septiembre de este año, han recuperado más de 2 millones de kilos de alimento. Eso equivalen a 5 millones de raciones.

¿Cómo evitar el desperdicio?
° Dentro del hogar, Alicia Guevara, directora del banco de alimentos de Quito, recomienda hacer menús. “A veces compramos lo que creemos que vamos a usar, pero se desperdicia”, lo ideal es tener una lista de los productos de la semana para que todo se termine y no se desperdicie.

En el caso de las empresas llevan el mensaje de que hay varios beneficios por evitar el desperdicio. “Además de ser un aporte social y ambiental también hay un beneficio económico, pues cuando se desechan cantidades grandes de alimentos se deben enviar a incineración y eso cuesta $1.400 por tonelada”.