Enfermedades respiratorios y gastrointestinales son las más comunes en la Cárcel Regional Sierra Norte

PROCESO. Los dispensarios cuentan con todos los equipos para atender a los internos.
PROCESO. Los dispensarios cuentan con todos los equipos para atender a los internos.

Las enfermedades más comunes en esta temporada en la Cárcel Regional de Cotopaxi Las enfermedades más comunes en esta temporada en la Cárcel Regional de Cotopaxi son las infecciones respiratorias, seguidas de las gastroenteritis y las crónicas como la hipertensión, la diabetes y el asma.

El Ministerio de Salud Pública tiene al interior del centro cuatro dispensarios médicos que en estas últimas semanas fueron cerrados debido al amotinamiento que se realizó el 22 de julio, pero que luego de un análisis, se resolvió reabrirlos desde hoy de forma paulatina.

Jorge Proaño, director distrital de Salud, informó que en el aspecto respiratorio hay varios factores que confluyen para el desarrollo de la enfermedad, uno de los más importantes es el clima; sin embargo las afecciones presentadas son controladas en cada dispensarios y no se han requerido, hasta el momento, derivar al paciente a una atención de especialidad en el Hospital General.

En cuanto a la gastroenteritis, también hay varios factores, como el consumo de agua inadecuada, los hábitos alimenticios inadecuados los que afectan a la salud, pero de igual forma los internos mantienen un control y la medicación necesaria para superar estas afectaciones.

Sobre las enfermedades que requieren de un mayor control y cuidado como son el virus del VIH Sida y la Tuberculosis, el personal de salud lleva un control estricto para que los pacientes cumplan con el debido tratamiento.

En la cárcel regional hay 37 personas con tuberculosis, entre hombres y mujeres que sí permanecen aisladas para evitar que la enfermedad se propague y que reciben a diario su medicación de manera directa para contrarrestar la enfermedad.

Y, las 27 personas que tienen el virus del VIH Sida, hombres y mujeres también reciben el tratamiento correspondiente.

Según Proaño, se realizan dos veces al año los tamizajes en la cárcel para conocer nuevos casos y desde el año anterior hasta el momento no se ha registrado un aumento de casos en las dos enfermedades, lo que evidencia que hay el control necesario y el tratamiento adecuado. Además, en los dispensarios médicos reciben atención periódica, las 19 mujeres que están embarazadas, quienes al término de su gestación serán trasladadas al Hospital General para el alumbramiento.

Salud preventiva

En el nuevo modelo de atención integral de salud penitenciaria hay lineamientos claros para trabajar en prevención de manera coordinada con el Ministerio de Justicia y con el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de Libertad y a Adolescentes Infractores del Ecuador (SNAI), explicó Proaño. Así trabajan en charlas preventivas con los internos y también en el diagnóstico de la problemática existente y son las autoridades penitenciarias las que deben dar solución a estos. (VHG)