La cabeza de un bebé ‘sacudió’ a barrio del sur de Quito

LEVANTAMIENTO. La Policía efectuó las diligencias de Ley en medio de la conmocionada población.
LEVANTAMIENTO. La Policía efectuó las diligencias de Ley en medio de la conmocionada población.

Redacción QUITO

El horror se encarnó en un cráneo humano. La extremidad apareció misteriosamente en el barrio San Blas del Beaterio, situado al extremo sur de la capital.

Ayer por la mañana sus moradores no dejaban de hablar del macabro hallazgo. La gente no sabía de dónde pudo salir la cabeza de un infante que, aparentemente, ya llevaba días de fallecido. El color de la piel era de un morado oscuro, además los animales ya se habían comido parte de la piel.

Esos signos de antropofagia hizo más compleja la tarea de saber si pertenecía a un niño recién nacido o si el pequeño murió por un aborto. Tampoco se pudo determinar el sexo de la criatura.

Espanto

A Liliana Georcano le cuesta superar el susto que se llevó cuando la cabeza cayó junto a sus pies. La mujer regresaba a casa después de dejar a su hija en la escuela. Caminaba como todos los días por la vereda del barrio, pero algo espantoso alteró su rutina.

Dos perros corrían tras otro que llevaba un bulto extraño en el hocico. Los animales se detuvieron junto a la dama y pelearon entre sí para hacerse de lo que llevaba el primer can.

Georcano temió ser atacada y espantó a los caninos para alejarlos, pero el miedo no desapareció. El horror recrudeció cuando vio lo que los perros dejaron.

Era la cabeza del infante que ya estaba formada, incluso lucía con abundante cabello.

La vecina alertó al resto de moradores sobre lo que presenció. El resto de la barriada se reunió alrededor de la cabeza, pero nadie se atrevió a tocarla. Lo que hicieron fue llamar a la Policía para que los uniformados se encarguen de la situación.

Procedimiento

El cráneo fue cubierto con una frazada azul para que no conmocione más a la población. Agentes de unidades especializadas en investigaciones de decesos hicieron un barrido por una quebrada del barrio San Blas. Se presumía que el resto del cuerpo podría estar entre la maleza, sin embargo, la búsqueda fue infructuosa.

El coronel Julio Navarrete, comandante del Distrito Quitumbe, explicó que a simple vista no se puede determinar si el cráneo le corresponde a un recién nacido o si la criatura murió a causa de un aborto.

Indicó que en el Departamento Médico Legal se harán procedimientos técnico – científicos que permitan revelar detalles sobre el tiempo de muerte y una edad estimada del infante.

La cabecita fue embarcada en la ambulancia 107 para su traslado a la morgue. (FLC)