Esmeraldas es una ciudad muy pequeña y en teoría debería ser también fácil de mantener bajo control. Uno de los problemas que se pueden observar, mientras las personas conducen, es la falta de semáforos, o en todo caso la falta de mantenimiento de ellos. He notado cómo la falta de energía ha causado accidentes que en algunos casos tuvieron víctimas que lamentar; por lo tanto, si el Ministerio de Transporte y Obras Públicas no toma las riendas en el asunto, al menos que lo haga alguna autoridad. La falta de sincronización entre una calle y otra conlleva también a que se genere congestionamiento del tráfico, por lo cual muchas veces los automóviles quedan en la mitad de la calle, porque el semáforo de la siguiente esquina ya está en rojo. Entonces, hasta que esto se pueda solucionar, se pide a los conductores un poco de precaución y hacer como cuando uno va a pie: observar a todos lados antes de acelerar.
Ing. Alan Leyva Méndez
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