Elia es un músico a quien algunos seguidores de la escena independiente ecuatoriana lo recordarán por Motozen, su primera gran banda que tuvo un gran momento de popularidad, hace ya una década, cuando se subían a las tarimas de los festivales nacionales y las cosas empezaban a cambiar.
Su nombre real es Ignacio Izquierdo y nunca ha parado de hacer música, así nos afirma en una entrevista telefónica donde pudimos saber de sus nuevos planes en Ecuador, ya que vino un par de meses a visitar a reencontrarse con su familia, grabar unos demos y redescubrir la escena local.
Un día de 2011 partió para Seattle, a vivir, a hacer música, a reunir todo lo que había aprendido y ponerlo en práctica como solista.
Así fue como grabó dos producciones: el EP ‘Sentir’ (2014) y el LP ‘Futuro Humano’ (2016), álbumes con los que ha recorrido varias ciudades de Estados Unidos, realizando conciertos.
“Mi concepto musical cambió en 2014, cuando estaba en Seattle (EE.UU.). El afán era hacer música e irónicamente me costó conseguir músicos para eso, siendo un lugar tan conocido por la escena grunge de los noventas. Entonces comencé a manejar un proyecto solitario por mi cuenta”, afirma el músico quiteño.
Con sus discos he estado de gira los últimos dos años pero Elia tenía ganas de finalizar el tour en Ecuador, para lo que buscó la ayuda de dos músicos locales: Juan Fernando Cifuentes (baterista) y Verónica Largiu (teclados y armonía).
“Acá estamos haciendo una mini gira. También vamos a hacer un show único de reunión por los 10 años de Motozen, el jueves 12 de julio, en The Hyde (Orellana y Reina Victoria)”, indica este artista que actualmente ya tiene 8 demos listo de su siguiente producción.
“Estoy en un proceso diferente para sacar el nuevo álbum y haré un crowdfunding en agosto. Steven Aguilar será mi productor, con él ya trabajé en 2014 con mi EP ‘Sentir’. Nos conocimos en Seattle pero ahora vive en Los Ángeles, igual que yo”, afirma.
“Este disco va a tener la misma esencia de Elia, aunque con la diferencia de que cuando grabé ‘Futuro humano’, lo hice como terapia y sanación, ya que mi primera hija había fallecido”, comenta Ignacio.
Pero la vida debe continuar y Elia dice que este disco estará dedicado a su hija Mila, quien ha sido una “fuente de inspiración y mucha alegría”. Además ya le puso nombre a la producción, se llamará ‘Flora’.
“Este último año me he dedicado mucho a la paternidad y, al mismo tiempo, a la música. Ha sido muy gratificante”, revela.
Hay dos ‘tracks’ que Elia dejó para el final y que grabará en Quito. El artista afirma que lo hizo a propósito para buscar inspiración local.
“Siempre me ha interesado mucho el ambiente donde uno está para inspirarse y también he tenido una pasión muy grande por las montañas. Mi intención no es poner elementos folclóricos, pero sí dejarme influenciar por el lugar donde me encuentro”, comenta.
“La nueva producción tendrá mis influencias de siempre: pop alternativo ochentero, post punk ochentero, chillwave e ítalo disco. Regresando a los Ángeles grabaré en el estudio de Steven Aguilar los demos que me lleve de acá”, asegura.
Al frente de todo
“Cuando eres solista manejas tu propio horario y no dependes de otros”, afirma Izquierdo y complementa que algo bueno de eso es que la mayoría de las ganancias van para una sola persona.
En cambio, encuentra una desventaja y extraña la “química” que se da con una banda y la experiencia de compartir con otras personas en vivo.
“Me encanta ser un ‘performer’ y presentarme frente al píublico, pero cuando tienes una banda, creas una sinergia muy interesante entre los músicos y el público”, dice emocionado.
Elia, finalmente, tiene como plan regresar a vivir en Los Ángeles y hacer más giras en vivo, una vez termine su nuevo disco. (CC)