Nuestro futuro, nuestros sueños

En medio de las malas noticias que son parte del diario vivir, con escándalos, corrupción y dolores, resaltan algunas iniciativas que nos hacen tener más fe en la calidad de los seres humanos, de las instituciones.

Una de estas iniciativas tiene un hermoso nombre: ‘Nuestro futuro, nuestros sueños’, que llevan adelante la Fundación Cofuturo y la Universidad Internacional de la Rioja (UNIR).

Esta idea, nacida al calor de las conversaciones por crear espacios de esperanza, reconoce y premia a los mejores deportistas ecuatorianos, de cualquier disciplina, deportistas que hayan tenido relevantes triunfos tanto en el país como en el exterior.

La idea fue presentada a fines del año pasado, pero es en este 2020, cuando se han podido concretar cuatro de estas becas, entregadas en ceremonias especiales, dos de ellas de manera presencial y las otras de forma digital; todas las becas significan mejorar el futuro de nuestros deportistas, cumplir sus sueños.

El primer homenajeado fue el destacado atleta Gudman Chalá, luego fue Sara Palacios, conocida como Sara del mar, quien tiene a su haber la triple corona de los mares, Carla Heredia, gran maestra del ajedrez y, en días recientes, la campeona de triatlón Elizabeth Bravo, quien nos representará en las olimpiadas de Tokio.

Qué mejor que pensar en hacer varias vidas, la que se escoge en un momento dado al transitar los caminos del deporte, pero que se recrea gracias a la posibilidad de culminar una carrera universitaria o un postgrado.

Eso significa ‘Nuestro futuro, nuestros sueños’, un proyecto más valioso aún en esta época de tantas incertidumbres y preocupaciones. Saber que algunos de nuestros mejores deportistas obtienen ese reconocimiento es alentador y nos genera esperanzas.