Encantamientos políticos

Hay ironías en la vida. En la política también. Justo en el tiempo en que el país suena convulso, económicamente hecho un lío, los siete mejores magos del mundo llegaron a Ecuador. Y, ante la pregunta de qué es la magia, respondieron: “Lo que los magos intentamos es transformar lo irreal en real, lo imposible en posible”.

Ironías, porque en la coyuntura política vamos observando estos juegos de prestidigitación. Las reformas económicas, por ejemplo, han puesto en el mismo lado de la orilla al correísmo y al socialcristianismo. Y hemos visto a correístas jalar el mismo remo que muchos a los que tanto persiguió el expresidente del ático. Y tenemos abogados que siempre fueron críticos opositores, convertidos por encantamiento en grandes defensores de los 10 años verdeflex. ¿Magia?

Ahora los indígenas, por haber liderado una protesta que se les fue de las manos, se creen en la capacidad de ordenarle al Gobierno cómo gobernar y de decirle qué va a aceptar y qué no. ¿Ilusionismo?

En una entrevista en una radio quiteña, el periodista le preguntaba a uno de los siete magos sobre su especialidad. El mago se esmeraba en explicar que hay muchas clases, que a él le gustan algunas. Y el periodista le preguntó: “¿Manipulación política no?”. Y el mago respondió: “No, eso no. Esos son demasiados buenos”.

Todo el mundo tiene derecho a cambiar con los años, pero ¿será que nunca tendremos políticos con coherencia toda su vida? ¿Será verdad eso de que todos tienen un precio? ¿Siempre habrá gente que se venda al mejor postor? ¿Será que, como dijo el mago, nos gusta que nos mientan?


El cielo cura y el médico cobra la minuta. Benjamin Franklin Estadista y científico estadounidense (1706-1790)

Matan los médicos y viven de matar, y la queja cae sobre la dolencia”. Francisco de Quevedo Escritor español (1580-1645)

Hay ironías en la vida. En la política también. Justo en el tiempo en que el país suena convulso, económicamente hecho un lío, los siete mejores magos del mundo llegaron a Ecuador. Y, ante la pregunta de qué es la magia, respondieron: “Lo que los magos intentamos es transformar lo irreal en real, lo imposible en posible”.

Ironías, porque en la coyuntura política vamos observando estos juegos de prestidigitación. Las reformas económicas, por ejemplo, han puesto en el mismo lado de la orilla al correísmo y al socialcristianismo. Y hemos visto a correístas jalar el mismo remo que muchos a los que tanto persiguió el expresidente del ático. Y tenemos abogados que siempre fueron críticos opositores, convertidos por encantamiento en grandes defensores de los 10 años verdeflex. ¿Magia?

Ahora los indígenas, por haber liderado una protesta que se les fue de las manos, se creen en la capacidad de ordenarle al Gobierno cómo gobernar y de decirle qué va a aceptar y qué no. ¿Ilusionismo?

En una entrevista en una radio quiteña, el periodista le preguntaba a uno de los siete magos sobre su especialidad. El mago se esmeraba en explicar que hay muchas clases, que a él le gustan algunas. Y el periodista le preguntó: “¿Manipulación política no?”. Y el mago respondió: “No, eso no. Esos son demasiados buenos”.

Todo el mundo tiene derecho a cambiar con los años, pero ¿será que nunca tendremos políticos con coherencia toda su vida? ¿Será verdad eso de que todos tienen un precio? ¿Siempre habrá gente que se venda al mejor postor? ¿Será que, como dijo el mago, nos gusta que nos mientan?


El cielo cura y el médico cobra la minuta. Benjamin Franklin Estadista y científico estadounidense (1706-1790)

Matan los médicos y viven de matar, y la queja cae sobre la dolencia”. Francisco de Quevedo Escritor español (1580-1645)

Hay ironías en la vida. En la política también. Justo en el tiempo en que el país suena convulso, económicamente hecho un lío, los siete mejores magos del mundo llegaron a Ecuador. Y, ante la pregunta de qué es la magia, respondieron: “Lo que los magos intentamos es transformar lo irreal en real, lo imposible en posible”.

Ironías, porque en la coyuntura política vamos observando estos juegos de prestidigitación. Las reformas económicas, por ejemplo, han puesto en el mismo lado de la orilla al correísmo y al socialcristianismo. Y hemos visto a correístas jalar el mismo remo que muchos a los que tanto persiguió el expresidente del ático. Y tenemos abogados que siempre fueron críticos opositores, convertidos por encantamiento en grandes defensores de los 10 años verdeflex. ¿Magia?

Ahora los indígenas, por haber liderado una protesta que se les fue de las manos, se creen en la capacidad de ordenarle al Gobierno cómo gobernar y de decirle qué va a aceptar y qué no. ¿Ilusionismo?

En una entrevista en una radio quiteña, el periodista le preguntaba a uno de los siete magos sobre su especialidad. El mago se esmeraba en explicar que hay muchas clases, que a él le gustan algunas. Y el periodista le preguntó: “¿Manipulación política no?”. Y el mago respondió: “No, eso no. Esos son demasiados buenos”.

Todo el mundo tiene derecho a cambiar con los años, pero ¿será que nunca tendremos políticos con coherencia toda su vida? ¿Será verdad eso de que todos tienen un precio? ¿Siempre habrá gente que se venda al mejor postor? ¿Será que, como dijo el mago, nos gusta que nos mientan?


El cielo cura y el médico cobra la minuta. Benjamin Franklin Estadista y científico estadounidense (1706-1790)

Matan los médicos y viven de matar, y la queja cae sobre la dolencia”. Francisco de Quevedo Escritor español (1580-1645)

Hay ironías en la vida. En la política también. Justo en el tiempo en que el país suena convulso, económicamente hecho un lío, los siete mejores magos del mundo llegaron a Ecuador. Y, ante la pregunta de qué es la magia, respondieron: “Lo que los magos intentamos es transformar lo irreal en real, lo imposible en posible”.

Ironías, porque en la coyuntura política vamos observando estos juegos de prestidigitación. Las reformas económicas, por ejemplo, han puesto en el mismo lado de la orilla al correísmo y al socialcristianismo. Y hemos visto a correístas jalar el mismo remo que muchos a los que tanto persiguió el expresidente del ático. Y tenemos abogados que siempre fueron críticos opositores, convertidos por encantamiento en grandes defensores de los 10 años verdeflex. ¿Magia?

Ahora los indígenas, por haber liderado una protesta que se les fue de las manos, se creen en la capacidad de ordenarle al Gobierno cómo gobernar y de decirle qué va a aceptar y qué no. ¿Ilusionismo?

En una entrevista en una radio quiteña, el periodista le preguntaba a uno de los siete magos sobre su especialidad. El mago se esmeraba en explicar que hay muchas clases, que a él le gustan algunas. Y el periodista le preguntó: “¿Manipulación política no?”. Y el mago respondió: “No, eso no. Esos son demasiados buenos”.

Todo el mundo tiene derecho a cambiar con los años, pero ¿será que nunca tendremos políticos con coherencia toda su vida? ¿Será verdad eso de que todos tienen un precio? ¿Siempre habrá gente que se venda al mejor postor? ¿Será que, como dijo el mago, nos gusta que nos mientan?


El cielo cura y el médico cobra la minuta. Benjamin Franklin Estadista y científico estadounidense (1706-1790)

Matan los médicos y viven de matar, y la queja cae sobre la dolencia”. Francisco de Quevedo Escritor español (1580-1645)