Migrantes buscan continuar su viaje mientras otros se radicarán en el país

SITUACIÓN. Algunos ciudadanos venezolanos se organizan para rentar una casa y poder vivir allí.
SITUACIÓN. Algunos ciudadanos venezolanos se organizan para rentar una casa y poder vivir allí.

Tulcán

Algunos viajan con enormes maletas sobre sus hombros o a la mano. Otros con mascotas, mujeres embarazadas y con niños en brazos. Todos ellos sometidos ante las inclemencias climáticas características de la ciudad del norte del Ecuador. Son migrantes venezolanos que huyen de la crisis por la que atraviesa su país.

En Tulcán, las esquinas de los semáforos son ocupadas por migrantes que se dedican a limpiar los parabrisas de los vehículos esperando recibir unas monedas para suplir su alimentación, estadía o pasajes.

Entre tanto, otros se enfocan en las ventas ambulantes o colaboran como obreros en las construcciones que se edifican en la localidad, buscando integrarse a la sociedad o ahorrando para dirigirse a otro punto del país.

Las voces de la migración

Keybeli Segovia, quien proviene desde Carabobo (Venezuela), busca viajar con su familia hasta Machala. Manifestó que no posee los recursos económicos para ir en bus hacia ese lugar y hará su recorrido a pie, por la carretera.

“Con lo que pidieron la visa en Perú, decidimos quedarnos en Ecuador. Esperamos que alguien nos pueda llevar y cuando lleguemos a Machala buscar trabajar por nuestra cuenta”, dijo.

Uno de los lugares que congrega a los migrantes venezolanos en la capital del Carchi es el parque aledaño a la terminal terrestre. Algunos inclusive pernoctan en el lugar a la espera de una habitación en los hostales que se encuentran alrededor.

Descansando en la vereda se encontraba Yuleidis Anges, quien llegó desde Caracas al Ecuador hace tres días. Busca ingresar a Chile, sin embargo debe pasar por Perú y no dispone de una visa. “Voy a pasar de ilegal hacia ese país de cualquier forma. Con algunos queremos irnos por las trochas”.

Así mismo, Eduardo Zabala, oriundo del estado Falcón (Venezuela), llegó hace 15 días a territorio ecuatoriano. Anhela llegar hasta Perú porque allí reside su familia, pero no dispone de una visa a pesar de tener en regla su pasaporte y cédula.

“Si llego a Perú y me exigen la visa me tocaría regresarme y quedarme aquí en Ecuador. En Tulcán la gente es más amable”, comenta.

Por su parte, Juan Castro, proveniente del Táchira (Venezuela), planea dirigirse a Chile. Tampoco dispone de la visa para ingresar a Perú. “Busco ingresar como sea. No tengo dinero para llegar allá. Iré como Dios me diga”.

Por otro lado, Viviana Castro, empleada del Hostal Eva, indicó que la afluencia de migrantes al interior del lugar varía según el día. “Algunos vienen para que les demos habitaciones económicas. También buscan algunos salir del país”.

Según información proporcionada por Danny Vásquez, coordinador zonal del Ministerio de Relaciones Exteriores, el día que mayor cantidad de migrantes cruzaron Rumichaca fue el viernes 14 de junio, con un total de 7.539, mientras que el sábado lo hicieron 5.956 y el domingo 2.282 venezolanos. (APRN)

DATO

Algunos migrantes venezolanos se organizan y buscan casa renteras para permanecer en Tulcán, o en su defecto acuden por una habitación en los hostales para pasar las noches.