Imbabura
“En medio de la chuma que tenía, sentí un ardor insoportable en mi espalda, creí que era un sueño, pero era realidad. Reaccioné y sentí que me quemaba”, declaró el sobreviviente a ese atentado que ocurrió en un cantón de la provincia.
“Los que hicieron esto o son locos, estaban drogados o en verdad son criminales”, aseguró el padre de B.D.Q., de 23 años de edad, quien además es padre de una niña de dos años.
Este atentado sucedió el pasado 11 de junio, a eso de las 20:30. Desde entonces, los familiares de la víctima se preocuparon más por su salud que por presentar la denuncia, pero ahora que está recuperándose de las quemaduras que sufrió en su espalda y en la axila se decidieron a acudir a la Fiscalía.
Al término de las evaluaciones del médico legista, el padre y su hijo aseguraron que el profesional emitió un certificado de 60 días de incapacidad para laborar.
“La superficie afectada es de un 19% y está en estado tardío de recuperación. Tiene un buen pronóstico, pero al inicio fue un verdadero calvario soportar el dolor de las quemaduras”, expresó B.D.Q.
Sospechas
El padre del afectado sostuvo: “sospechamos de unos expendedores de droga que aparecieron por el cantón. Mi otro hijo que tiene 20 años y una discapacidad intelectual de 62%, un día habló con la Policía y desde su inocencia habría contado sobre los vendedores de droga. De pronto eso ocasionó el problema”.
Días después de lo contado, a través del Facebook, la víctima de las quemaduras fue amenazado. “Justo el día del atentado me puse la camisa verde de mi hermano, salía de la comunidad en la que vivimos, localizada a una hora y media caminando, me topé con unos amigos, tomamos trago hasta que me he quedado dormido”, declaró.
“No tengo enemigos, todo lo contrario, por eso pienso que los que trataron de matarme quemándome se confundieron con mi hermano por la camisa que llevaba puesto”, dijo.
Las autoridades no han realizado las investigaciones para localizar a los responsables de este acto violento. “Debían actuar de oficio, sostuvo un abogado de libre ejercicio”. (RPCH)