Quito recibe hasta 10 veces menos Inversión Extranjera Directa que otras capitales de la región, a pesar de su potencial en cinco áreas

HECHO. La ZEDE es uno de los proyectos en carpeta para impulsar el potencial logístico
HECHO. La ZEDE es uno de los proyectos en carpeta para impulsar el potencial logístico

Actualmente están en carpeta, a través del trabajo conjunto entre la Cámara de Comercio y el municipio de Quito, cinco grandes proyectos.

En promedio, Quito atrae $200 millones de Inversión Extranjera Directa (IED) al año. Eso es hasta 10 veces menos que lo que logran concretar otras capitales de la región como Bogotá o Lima, donde las inversiones suman entre $1.000 millones y $2.000 millones

Francisco González, coordinador del Proyecto Quito Centro de Oportunidades, explicó que, a pesar de las dificultades de una economía como la ecuatoriana, el potencial de Quito es grande; pero en muchos casos se desaprovechan las oportunidades.

Por eso, la Cámara de Comercio y la Secretaría de Desarrollo Productivo del Municipio, desde hace un año y medio, trabajan para establecer dónde están las mayores potencialidades y cómo se pueden impulsar proyectos de gran impacto social, para convertir a Quito en un destino atractivo de inversiones.

Una de las principales conclusiones es que la capital ecuatoriana puede competir y atraer capitales en cinco sectores o actividades específicas: agroindustria; turismo: servicios tecnológicos; salud y construcción de infraestructura.

Esto no quiere decir que no existan oportunidades en otros campos; pero el acento está en esos sectores con alto crecimiento; y dónde otras ciudades de la región están atrayendo capitales, por lo que hay inversionistas en busca de proyectos interesantes.

Seguridad jurídica

Ante la pregunta de por qué Quito no ha atraído más inversiones, a pesar de su potencial, un primer elemento a tomar en cuenta es que hace falta seguridad jurídica. Los inversionistas valoran que existan leyes claras y previsibles.

Es decir, que se entienda claramente qué se debe hacer para invertir y desarrollar un proyecto; y que las reglas del juego no cambien a través de reformas tributarias, cambios de ordenanzas y otras normativas.

“Cuando estás haciendo la valoración financiera de un proyecto grande se incorporan los flujos financieros tomando en cuenta beneficios tributarios. Si esos beneficios cambian o desaparecen, por una reforma tributaria, se debe hacer todos los números de nuevo y vuelves al punto de partida. Los cambios normativos que ha habido en el Ecuador han obligado a que los proyectos tengan que actualizarse varias veces y no puedan salir al mercado”, recalcó González.

 Portafolio creíble

Otro punto que valoran los inversionistas es que exista un portafolio de inversiones creíble y realizable. En este punto, un buen intento fue el catálogo llamado ‘Quito Invest’, que se creó en las administraciones de Augusto Barrera y Mauricio Rodas; pero la mayoría de los proyectos (alrededor de 30) han tenido que ser reevaluados y redimensionados.

Actualmente, están en carpeta cinco grandes proyectos, que se han rescatado, mejorado y actualizado. Los procesos de atracción de inversiones no son de corto plazo, sino de mediano y largo plazos; y antes de salir a buscar socios privados se debe cumplir trámites aprobatorios y otros requisitos.

Esto sucede, por ejemplo, con el proyecto Vindobona, que consiste en el tratamiento de aguas.

“Las complejidades que tienen los procesos de atracción de inversiones no solo incluyen la identificación del proyecto, sino luego identificar el marco jurídico adecuado para que se desarrolle con beneficios para la sociedad y los inversionistas”, aclaró González.

 Educación y realismo

La atracción de inversiones también depende del nivel educativo de la ciudad. Así, por ejemplo, en el área de servicios tecnológicos, una de las grandes falencias de Quito, y de Ecuador en general, está dada por la falta de perfiles técnicos y con niveles adecuados de inglés.

Por eso, se necesita incentivar con más fuerza el desarrollo de la educación técnica, a través de carreras cortas. Además, existe la formación dual que tiene gran potencial de formar gente con habilidades tecnológicas.

Por otro lado, también se deben afinar bien los objetivos, es decir, en el caso de los servicios tecnológicos, Quito no puede apuntar a convertirse en un mega creador de robótica, cohetes o superchips; pero puede impulsar su potencial en el desarrollo de software y en la generación de tecnología enfocada a la innovación en los procesos de mejora de otros sectores como la agroindustria. (JS)

“Los proyectos de inversión no obedecen a una ideología. Si hay que hacer una carretera no importa si el funcionario es de izquierda o de derecha. Eso es completamente irrelevante. Lo importante es hacer los proyectos que generen el mayor bienestar social”, Francisco González, coordinador del Proyecto Quito Centro de Oportunidades.

Proyectos en carpeta

Zona Especial de Desarrollo Económico de Quito (ZEDE-Quito)

Este proyecto es impulsado por el Municipio de Quito, a través de la Empresa Pública Metropolitana de Servicios Aeroportuarios, Gestión de Zonas Francas y Regímenes Especiales (Epmsa).

Se busca el eficaz aprovechamiento de 205 hectáreas ubicadas estratégicamente junto al Aeropuerto de Quito como un espacio para desarrollar industria y servicios logísticos con proyección internacional.

El monto de inversión en activos productivos está estimado en $341,40 millones. El modelo de gestión es una Alianza Estratégica con inversionistas privados por un plazo de 30 años.

 Extensión de la Primera Línea del Metro

El proyecto busca la extensión del Plan Maestro de Movilidad para la Ciudad de Quito 2008-2025, desde El Labrador hasta La Ofelia, buscando la mejora general en el sistema de transporte público de la ciudad, añadiendo a la línea actual un importante número de viajeros.

El monto de inversión en activos productivos se proyecta en $5.099,69 millones, bajo el modelo de Alianza Estratégica. La empresa municipal a cargo es el Metro de Quito.

 Nuevo complejo ambiental del Distrito

El actual Relleno Sanitario del Distrito Metropolitano de Quito (Rsdmq), abarca un área aproximada de 65.00 hectáreas distribuidas, en donde se reciben y disponen en promedio 2.200 ton/día de residuos.

Se necesita un nuevo espacio, con una vida útil de al menos 20 años, con un centro de investigación, centro de separación de residuos sólidos, centro de acopio de materiales reciclables, centro de compost, academia de educación ambiental y demás facilidades.

El modelo de gestión también es la alianza estratégica con inversores privados.

 Nuevo servicio de recolección de basura

El objetivo es reemplazar y ampliar la flota vehicular, que actualmente es a diésel y a gasolina, a una flota eléctrica. Esto haría que Quito sea el primer gobierno local en el país que realice el servicio de recolección de residuos de manera energéticamente eficiente.

La modalidad de inversión es la alianza estratégica con un monto aproximado de $3,29 millones. Emaseo está a cargo del proyecto, pero solo existen estudios técnicos hasta el momento.

 Tratamiento de las aguas residuales (Vindobona)

El objetivo principal es la recuperación de los recursos naturales por medio de: Intercepción y conducción de las aguas residuales mediante emisarios en túnel; tratamiento de las aguas residuales urbanas mediante el procesamiento de estas aguas en la Planta de Recuperación de Recursos ‘Vindobona’; aprovechamiento de las aguas residuales urbanas para generación hidroeléctrica, usando aguas negras crudas mediante dos centrales en línea.

Los ríos involucrados serían Machángara, San Pedro, Monjas y Guayllabamba. La inversión estimada está en $792,4 millones y la modalidad sería la Alianza Público-Privada (APP). Actualmente existen estudios legales, técnicos y financieros.